Flavia Tello es argentina, aunque hace 16 años decidió completar estudios de Maestría en España y allí encontró una gran pasión por la que decidió quedarse: el trabajo en la Unión Iberoamericana de Municipalistas (UIM).

En la UIM creció profesionalmente hasta que se convirtió en Directora del Gabinete Técnico y Responsable de la Unidad de Género, en línea con su compromiso con los derechos de las mujeres y la igualdad, desde donde dirigió proyectos tan emblemáticos como las Cumbres Iberoamericanas de Agendas Locales de Género y la creación de la Red Iberoamericana de Municipios por la Igualdad de Género.

Ahora ha decidido emprender un nuevo reto en su carrera profesional y acaba de incorporarse a la Comisión Interamericana de Mujeres de la OEA como Coordinadora del Task Force Interamericano sobre Liderazgo y Empoderamiento de las Mujeres en las Américas.

1.- ¿Qué significa en tu vida la Unión Iberoamericana de Municipalistas?

En la UIM tuve la oportunidad de poner en práctica mis estudios sobre municipalismo y gestión pública, y sin lugar a dudas fue el espacio que me permitió aprender cada día de cada persona y de cada experiencia territorial y cultural que hermana a quienes nos hemos vinculado a través de la UIM.

He aprendido y crecido en la UIM, pero siento al mismo tiempo que he podido retornar la oportunidad con compromiso y entrega. Y siento una profunda satisfacción por haber contribuido a este magnífico proyecto que es la UIM; en particular, propiciando a dejar bien alto el nombre de la UIM instalando la agenda de género a través de distintos ejes de acción.

2.- En relación al trabajo que has realizado en la UIM, por qué te vinculas desde tu activismo como municipalista a la temática de género en general y a la participación política de las mujeres en particular

Echando la vista atrás siento que desde niña me desconcertaron las desigualdades a las que se nos sometía por nuestra condición de ser mujer. Y desde el activismo municipalista entendí que los gobiernos locales y las comunidades tienen un importante rol para combatir esas desigualdades. Ya desde la  UIM, encontré desde este espacio distintas vías a partir de las cuales podíamos abordar el tema con un discurso propio y coherente a nuestros principios de distinguir a los gobiernos locales como instrumento del desarrollo en los territorios. Un desarrollo que, desde mi convicción personal (que ya es institucional), debe ser asimismo garante del derecho de todos y todas a la igualdad sustantiva.

¡E hicimos grandes cosas! Junto a un gran equipo humano dentro de la UIM, hemos logrado consolidar importantes proyectos, y hemos afianzado alianzas estratégicas para un trabajo en red que ha permitido ampliar nuestra presencia en distintos espacios. A través de programas de formación, gestión del conocimiento, construcción de redes, publicaciones especializadas, y las cada vez más exitosas Cumbres Iberoamericanas de Agendas Locales de Género, hemos logrado posicionar a la UIM como referente en la tríada género-municipio-políticas públicas.

3.- ¿Cuáles son los nuevos desafíos que asumes en la OEA?

Tengo el privilegio de empezar a coordinar un ambicioso pero necesario proyecto que busca contribuir al fortalecimiento del liderazgo de las mujeres en los sectores público y privado y al avance de una agenda de políticas sobre la igualdad de género y los derechos de las mujeres en las Américas. Lo distintivo de este proyecto, es que para ello se ha creado el Task Force Interamericano, integrado por distintas agencias internacionales de cooperación que en el marco de la pasada Cumbre de las Américas decidieron armonizar sus esfuerzos y líneas de acción para conseguir resultados más eficaces. De esta manera, la misión del Task Force se enmarca en la Agenda 2030 buscando contribuir específicamente a los ODS 5 y 17. Mi misión en particular, articular esa agenda de trabajo conjunto entre organismos tan importantes como ONU Mujeres, PNUD, OPS, BID, ParlAmericas, CEPAL, CLADEM, CIWIL, Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y la Comisión Interamericana de las Mujeres de la OEA que asume la Secretaría Permanente del Task Force y de ahí mi incorporación a sus oficinas en Washington DC.

4.- ¿Cómo piensas darle seguimiento a todo el trabajo que la UIM desarrolla en materia de igualdad de género y seguir vinculada al trabajo de las mujeres desde la perspectiva de lo local?

Se ha logrado construir y avanzar en un trascendental mensaje para la acción desde la política pública local con perspectiva de género. Ha habido y siguen habiendo significativos aportes desde la academia y el análisis político en este sentido, pero creo que la UIM ha logrado instalar este tema como un asunto clave en las agendas locales. Porque hemos logrado plantearlo, debatirlo, profundizarlo y ampliarlo con quienes están en las comunidades y el poder local. Hemos ido más allá de las teorías y hemos dicho cómo.

Y me gustaría seguir contribuyendo a esta construcción. Vaya donde vaya llevaré mi mirada municipalista y feminista. Y esté donde esté, prestaré mi apoyo para hacer crecer aquello que un día forjamos en la UIM para ampliar eso que me encantó nombrar como “agendas locales de género”.

Si hay algo que distingue a la UIM es que representa una amplia red de personas e instituciones que tienden lazos, uno de los cuales es el que me gustaría conectar desde este nuevo espacio.

5.- ¿Qué le quieres compartir a las mujeres de toda Iberoamérica con que has tenido oportunidad de trabajar desde la UIM y a los y las municipalistas que sienten orgullo de verte partir y cierta nostalgia por saber que ya no estás en nuestra entidad?

Pregunta difícil!! A todos y todas las personas que me acompañaron en distintos momentos de la UIM quiero decirles GRACIAS. Gracias por la confianza, por el apoyo, el cariño y la amistad que me llevo de muchos/as.

Me da cierta tristeza porque soy consciente de que a algunos/as no les volveré a ver fácilmente. Pero por otro lado, confío en que desde este nuevo espacio tendré la oportunidad de seguir articulada con algunas lideresas y colegas con quienes compartimos la agenda por la igualdad y los derechos de las mujeres. Y eso compensa de alguna manera mi propia nostalgia también.